domingo, noviembre 12, 2006

Diarios de Freaklandia. Capítulo 7

Cosas que me no me gustan de Freaklandia
- La capa de hielo que cubre el suelo. Resbala mucho, muchísimo, y no es precisamente un blando colchón para las caídas.
- La pinta de nenazas de los chicos fineses. Además, son enanos.
- Un bus puede retrasarse hasta 20 minutos los días de nieve o, directamente, no pasar y dejarte esperando al siguiente. Grande la gracia de esperar media hora a 10ºC BAJO CERO.
- Los sábados, el comercio se paraliza a partir de las 18'00.
- Las frutas y verduras son caras y malas.
- Entre semana, el último bus pasa a las 22'30. A mí que se me quedaban cortas las 00'00 del metro de Barna...
- El brebaje al que llaman café. Encima le meten la leche fría.
- No retiran la nieve de las calles, a lo sumo la apartan un poco. Aparte de lo difícil que se hace ir por la acera o bajarse del bus, al cabo de un par de días está sucia y es una masa inmunda.
- Que no paren de rajar de todo.
- Las indescriptibles salsas en las que bañan la comida para disimular que no saben cocinar.
- Lo cerrados que son los fineses para hacer amigos.
- En algunos sitios encuentras grifos en los que la tubería del desagüe se queda a 2 cm del suelo. Hay un agujero para evacuar el agua, pero como la tubería no está justamente encima del mismo, se inunda todo.
- La sosería de los heavies fineses.
Cosas que me gustan de Freaklandia
- Si el conductor del bus ve por el retrovisor que llegas corriendo con la lengua afuera, espera. Si ya había iniciado el arranque, para y vuelve a abrir las puertas.
- La variedad de leches y panes, todos buenísimos.
- La suave luz gris, sutil y delicada.
- La serenidad del paisaje nevado.
- La calefacción baja. No convierten las casas en saunas como hacemos los españoles, que vamos en tirillas en febrero.
- Los pulla (bollitos) de canela. ¡Están que te mueres!
- La extremada puntualidad de los buses si el tiempo es bueno.
- Hay bombones y chocolatinas buenos y baratísimos en cualquier parte.
- La forma de los ojos de los finlandeses. Algo achinados, como un elfo.
- El aire, puro y vivificante.
- Lo mucho que se alegran por que les digas cualquier chorradita en finés.
- El súper abre el domingo (¡gracias, Señor!).
- La sauna, aunque no vaya a menudo.
- ¡Hay H&M! ¡Yujuuu!
- Lo espaciosos que son los edificios.
- La música.

Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.
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4 comentarios:

Unknown dijo...

Me intriga la cosa rosada esa que tiene la comida encima :S

Anónimo dijo...

Que te dejas a Papá Noel, que además estará en breve en nuestros hogares ;) Yo creo que la naturaleza también es un punto a favor de Finlandia. Y que sea el país con mayor transparencia política del planeta (o eso dicen). Y, por supuesto, como has dicho, la música :D

Un besote de alguien que te echa mucho de menos,
Mun

Tristana's leg dijo...

Santo Compañero de Magdalena, dime que lo que recubre la comida ésa no es mantequilla con colorante. Es lo único que faltaría para acabar de constatar mi teoría: Irlanda estaba en un origen unida a Finlandia. Llegó El Mumin Gigante y de un bote mantequilloso, la mandó al oeste, donde se amarró a la punta de Escocia (de ahí las semejanzas entre el acento escocés y el irlandés) y después fue bajando hasta la posición en la que se encuentra ahora. Tuvo que ser así. Si no, no me lo explico XD.
Faith and begorrah, honey, jus'take a pint. Good for ya. Look for a Temple Bar where beer is fair and men are... incomparavel (léase marcando las erres más de lo normal y haciendo todas las "u" lo más cerradas posible).

Mirko dijo...

Hola Roadmaster.
Desde el blog de Carabiru me he plantado aquí en una mañana aburrida de trabajo y me he encontrado con la agradable sorpresa de encontrarme con las experiencias de una mallorquina en Finlandia.
No he podido evitar leer todas tus entradas dedicadas a este país tan especial para mí, casi he podido saborear el pulla a través de tus palabras :-)
Lo cierto es que mi madre es finlandesa :-P y tengo cierta envidia porque has pasado más tiempo y visto más cosas de lo que he podido hacer yo. Mis viajes se han limitado a unas pocas semanas durante los veranos.
Es cierto lo que dices, los fineses son muy fríos y algunos bastante freaks, pero yo destacaría su civismo y un enorme respeto y amor por la naturaleza. De todo lo que tiene Finlandia destaco su maravillosa natura, sus lagos y bosques que tanto me inspiran... también echo de menos las saunas,el pirakka (no lo probaste?), las barbacoas con sus salchichas, la tranquilidad,...
Aunque no hablo finés he heredado parte de su carácter tímido y a veces bastante (no su frikismo, eeeh?). Mi familia ama España y todos los años nos visitan, pero aunque parte de mí sepa que la poca luz y frialdad me harían pasarlo mal allá, siento que tengo una deuda histórica con este país. A veces pienso que debería quedarme un tiempo a explorar mis raíces, y después de todo, tenemos muchas costumbres finesas en casa (y mira que soy de Tenerife :-P)
Tus experiencias (Erasmus?) me hacen sonreír, porque yo sentí algo parecido estando en Dinamarca. Son un cúmulo de situaciones inolvidables que aunque regreses, no se volverán a repetir.
Un saludo y gracias por hacerme soñar.
Mirko